Quería dejar por escrito todo lo que me han aportado estos dos años en a universidad, y es que en realidad, lo que menos he aprendido son conocimientos relacionados con la carrera.
Hace ya dos años en mi primer día de clase, los nervios de aquellos 200 alumnos se podían palpar en el ambiente. Nadie conocía a nadie, y si hacías la carrera con una persona que conocías era Uniovi la encargada de separaros en dos clases diferentes, por eso no hay problema.
A los dos días ya se podían ver algunos grupitos empezando a formarse. Intentábamos que todo fuera bien, todos queríamos hacer amigos nuevos en la facultad, por supuesto. Lo que yo nunca me habría podido imaginar, y mira que me lo repitieron miles de veces, era que iba a llegar a conocer a ciertas personitas que ahora son parte de mi vida, con las que necesito hablar todos los días, con las que no te vale con estar una hora con ellas, sino que necesitas 2, 3, 4... Ellas me hacen sentir bien, me hacen sentir especial, y estoy segura de que muchos de los valores que ahora tengo como persona se los debo a ellas. Porque estos dos años han sido los mejores de mi vida, aún cuando las cosas no iban bien personalmente ellas estaban ahí, con su sonrisa, con su ánimo, con su fuerza, con su cariño. Se que a día de hoy las necesito tanto como a mi familia, porque los amigos son la familia que tenemos el lujo de elegir nosotros mismos.
El año que viene los mas probable es que nuestros caminos se separen un poco, pero se que seguirán estando ahí siempre, aún cuando diga que no necesito a nadie, que estoy bien, que yo sola puedo con las situaciones, ellas van a estar dándome su apoyo, desde más lejos o desde más cerca, eso no importa.
Estoy convencida de que juntas formamos algo muy grande, algo inexplicable.
Solo me queda daros las gracias por todo lo que habéis hecho estos últimos dos años por mi, nunca lo voy a olvidar, lo prometo.
Os quiero Lobas.
